Camino a la escuela, los niños jugaban con un balón remendado. Al golpear una piedra por error, el mayor de los chicos hizo estallar una mina antipersonal, que destrozó su pierna. Los niños se miraron perplejos entre sí, temerosos de mostrar su alegría por otro día en que no tendrían clases.
9 opiniones inteligentes:
Ay! que triste y realista. Pero la vida también tiene su lado feo desgraciadamente.
Una amiga mía se rompió un pie jugando a fútbol, pero no por pobre, si no por tonta. Jugaban con una piedra muy redonda, pero obviamente muy dura. En fin...
un abrazo Serio :)
Lo que hace la costumbre.... que pena.
Un abrazo.
El juego que deberia ser lúdico llega a ser dramatico, gracias a los adultos.Bonito relato. Un saludo.
Es muy duro, ver como si vives desde que naces en pobreza, hambre, guerra, tristeza...llegas a una situación de esas, en que ves morir alguien ante tus ojos por restos de una guerra continuada con el tiempo, o ves como van muriendo todos tus allegados y conocidos de hambre y no hay sorpresa por esos actos, que se convierten en algo permanente, por verlos a diario.
La consecuencia de un mundo con los ojos cerrados.
Felicidades por tu breve, pero concisa, clara y hermosa entrada.
Besos de sábado!!
Gracias Ardilla Roja, estela, Marina y SeaSirens por sus sentidos comentarios, que exceden largamente lo poco que pude expresar con mi breve texto.
Lo bueno si breve ya se sabe. En este caso incluso lo breve es intenso a la vez.
Un saludo de domingo
Gracias Paco, saludos
Pues tu breve relato yo lo resumiria en una palabra INJUSTICIA.
No es justo que hayan lugares de este mundo donde los niños no tengan derecho a jugar sin peligro de ser mutilados y encima que lo tengan ya asumido como algo normal y le puedan ver incluso la parte positiva a esa desgracia.
Horror para reflexionar...
Estamos en sintonía, Tag, es difícil pensar de otro modo.
Publicar un comentario